Con este titulo comienza un artículo que salió publicado en una revista de los años cuarenta del siglo XX. De todas las unidades que formaron las famosas escuadrillas azules, la que sin duda fuera más fotografiada, y seguida en sus primeros movimientos, tanto a la salida de España, como su posterior trabajo en el frente ruso, fue sin duda la 1ª escuadrilla azul. Dicha unidad aérea apareció en decenas de portadas de periódicos y revistas, y fueron varias docenas las entrevistas y artículos que a dicha unidad o a sus miembros se les realizó. En mi archivo tengo varios de esos periódicos y revistas que hablaron sobre esta escuadrilla. Y uno de estos artículos, quizás uno de los más desconocidos, sea precisamente el que habla de las mujeres de esos aviadores azules.
El
articulo firmado por Esperanza Ruíz-Crespo, con fotografías de Zaidin, habla de
las mujeres de varios de estos aviadores de la 1ª escuadrilla. Aparecen el
comandante Ángel Salas Larrazábal y su mujer, y los tenientes Emilio O’Connor y
su hermana, Demetrio Zorita y su madre, y Ángel Mendoza y sus amigas. El artículo
básicamente habla de la angustia de estas mujeres por sus hermanos, maridos o
hijos allá en Rusia, a la espera de sus noticias y sobre todo de su pronto
regreso, esa angustia que llevan con resignación cristiana, entre rezos,
suspiros, trabajos, y la espera del correo, que alivie un poco las penas del alma.
El
bodegón.
El articulo de la revista
ocupa como se aprecia dos caras, lo que me ha podido permitir montar dicho
bodegón (archivo Carlos Bourdon).
He utilizado para realizar el bodegón aparte de la revista una serie de emblemas o distintivos que aparecen en cada una de las fotos de los pilotos de la escuadrilla.
Arriba, la página
izquierda del artículo, donde aparece Salas y su mujer, más abajo el teniente
O’Connor y debajo su hermana. (archivo Carlos
Bourdon).
Arriba, la página derecha del artículo, en ella aparecen el teniente Zurita con su madre y el teniente Mendoza con sus amigas.(archivo Carlos Bourdon).
Aquí he colocado el
título de piloto militar m-41 genérico para todos, así como la cruz de hierro
de segunda clase y el distintivo de piloto de la Luftwaffe.
La parte final del
artículo.
Fuentes: elaboración
propia, revista y emblemas colección Carlos Bourdon.
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