Durante la guerra civil española de 1936-1939 llegaron a existir casi cien
compañías de transmisiones. Estas compañías que se encontraban por toda la
geografía española, allí donde había una unidad del Ejercito Nacional, se
encargaban de las transmisiones de las grandes unidades. Teniendo como unidad
central el Regimiento de Transmisiones de El Pardo, sus cuadros de mandos,
tanto de oficiales como de suboficiales y clases de tropas, fueron el germen de
las distintas compañías que se fueron incorporando a las grandes unidades tipo
división que se crearon durante la
guerra civil. Cuatro de estas compañías fueron denominadas “del Aire”, las 1ª,
2ª, 3ª y 4ª Compañía de Transmisiones del Aire, que daban servicio de
comunicaciones a las distintas unidades de la Aviación Nacional.
En el libro “Historia Militar de las Transmisiones el Regimiento de El Pardo”, de don Carlos Laorden Ramos, viene en su
apéndice documental una relación de las compañías de transmisiones, entre
ellas, las agregadas a la Aviación Nacional. Estas son:
Grupo de comunicaciones de Aviación
Formado en junio de 1938
P.C.: desconocido
Mandos: Comandante Martinez Franco, Teniente Adolfo Alonso Martinez, y
Alférez Provisional José Luis Castejón
.
1ª Compañía de Transmisiones del Aire
Formada en diciembre de 1937
P.C.: desconocido
Mandos: Capitán, Federico Méndez Villamil, Teniente Eliseo Nebreda Garcia, Alférez
Mauro Paredes Llorente, y Alférez Roberto Poole Ricardo.
2ª Compañía de Transmisiones del Aire
Formada en 1938 en Burgo de Osma
P.C.: Ávila
Mandos: Capitán Simón Blaya Muñoz, Teniente Provisional Luis Garcia de
Paadin y Teniente Provisional Fernando Suarez Santibáñez.
3ª Compañía de Transmisiones del Aire
Formada en 1938
P.C.: Ávila
Mandos: Capitán Ramón Salazar Marcos, Teniente Antonio López Ferrero y
Alférez Eustaquio Zamora Vázquez.
4ª Compañía de Transmisiones del Aire
Formada en 1938
P.C.: Fuente de Cantos, Badajoz.
Mandos: Capitán E.C. Luis de Ussía y Gavalda, Alférez E.C. Javier Espinosa
de los Monteros, y Alférez Provisional Carlos Kocherthaler Caturla.
En 1937 la Jefatura de Transmisiones ordena que los Capitanes Méndez
Villamil y De Ussía, de la 1ª y 4ª Compañías de Transmisiones del Aire
respectivamente, se trasladaran a Cintruénigo a hacerse cargo de dos compañías
de transmisiones de la Legión Cóndor debido a la supuesta repatriación de la
unidad a Alemania, incluso se reciben los uniformes que el personal alemán
llevó en la guerra civil, pero dicha repatriación no se lleva a cabo y los dos
oficiales vuelven a sus destinos, y las dos compañías continúan a las ordenes
de oficiales alemanes.
Sello de caucho de la 4ª Compañía
del Aire en plena guerra civil (extraído del libro “Historia Militar de las Transmisiones el Regimiento de El Pardo”, de don Carlos Laorden Ramos)
Estas compañías de transmisiones del aire tenían como cometido principal la
instalación de redes de comunicaciones entre los campos y aeródromos de
Aviación, la construcción de la infraestructura de la Jefatura del Aire en las
distintas Regiones Aéreas, la construcción de circuitos telefónicos
específicos, el tendido de líneas telefónicas, la instalación de centrales
telefónicas en distintos aeródromos, y todo aquello que las comunicaciones
entre Regiones Aéreas, aeródromos, Jefaturas, instalaciones aéreas eran necesarias
para su buen funcionamiento, así como las comunicaciones entre la Aviación
Nacional y los distintos Cuerpos del Ejército para la colaboración entre
Ejércitos.
Hay también una serie de unidades que estarían relacionadas con la Aviación
Nacional, que son:
Sección Negrilla del Aire, Sección Baleares, Sección Legionaria
Independiente, y Sección de Comunicaciones del Ejercito “Escuelas de Aviación”.
Hacia el final de la guerra civil las comunicaciones entre las distintas
unidades de la Aviación Nacional y de los Ejércitos de Tierra estaban
organizadas de la siguiente forma:
Agrupación de Transmisiones de Aviación
P.C.: Burgos
Mando: Teniente Coronel Martinez Franco
1er Grupo de Aviación 2º Grupo de Aviación
Mando: Comandante Patiño Mando: Comandante
Rodríguez Delgado
1ª Cia Trans del Aire 3ª Cia Trans del Aire
P.C.: Zaragoza
P.C.: León
Mando: Capitán Méndez Villamil Mando: Capitán Ramón
Salazar
2ª Cia Trans del Aire 4ª Cia Trans del Aire
P.C.: Ávila
P.C.: Carmona (Sevilla)
Mando: Capitán Simón Blaya Mando: Capitán Luis de Ussía.
Anverso y reverso de un documento de
filiación de un soldado encuadrado en la 4ª Compañía del Aire en la guerra
civil. (Archivo Carlos Bourdon)
Tras el final de la guerra civil y el nacimiento del Ejercito del Aire en
1939, se crea el 24 de septiembre de 1939 el denominado Regimiento de
Transmisiones del Ejército del Aire, con personal de las distintas Compañías de
Transmisiones del Aire, personal de Transmisiones del Ejercito de Tierra,
Jefes, Oficiales y Suboficiales. Esta unidad de Transmisiones dependía del
Ejército de Tierra pero prestaría servicio en el Ejercito del Aire. Al poco
tiempo la unidad pasa a llamarse “Servicio y Tropas de Transmisiones para el
Ejercito del Aire. El 11 de enero de 1944 se crea el Servicio de Transmisiones
del Ejercito del Aire, estando ubicado en la Colonia de El Viso de Madrid. Con
el paso del tiempo cambiara de denominación varias veces.
5 de febrero de 1946, Agrupación Central de Transmisiones del Aire.
7 de abril de 1951, Primera Agrupación de Transmisiones, ubicándose por
primera vez en Getafe.
3 de mayo de 1954, Primer Grupo de Transmisiones del Aire.
31 de julio de 1978, Grupo Central de Transmisiones.
8 de octubre de 1980, Grupo de Transmisiones del Cuartel General del
Ejercito de Aire.
23 de Abril de 1988, Grupo de
Transmisiones, actual nombre de la unidad, y desde 1951 sigue estando en la
Base Aérea de Getafe. El GRUTRA, que es como colonialmente se conoce a la
unidad, pero eso es otra historia…
Los emblemas.
Inicialmente el personal de las Compañías de Transmisiones del Aire vestía
durante la guerra civil como el resto del personal del Ejercito del Tierra.
Cuando esta acaba y se crea el Regimiento de Transmisiones del Ejercito del
Aire, siguen vistiendo con la uniformidad del Ejercito del Tierra, ya que
dependían de este Ejercito, pero como a su vez servían en el Ejercito del Aire,
se les agrego a los emblemas de su uniforme, un rombo en fieltro de color gris
con el emblema de Aviación. Fueron conocidos entre el personal del Ejercito del
Aire como los “agregados”.
Rombo en color gris con el emblema
del Ejército del Aire en su centro. El nombre de este rombo era Agregados de
otros Ejércitos.(colección Carlos Bourdon)
Fotografía del soldado Ballesteros
perteneciente al Regimiento de Transmisiones del Ejército del Aire en 1941. (Fotografía
blog GRUTRA).
Trozo de un cuello de uniforme del
Ejercito de Tierra en el que podemos ver
la torre de Ingenieros en la punta del cuello y encima de este el rombo
de agregados de otros ejércitos de Aviación. (Colección Carlos Bourdon)
Al ser el Ejercito del Aire de nueva creación necesito de su hermano mayor
el Ejército de Tierra para que numeroso personal cualificado, especialistas de
otras materias que en Aviación no eran muy corrientes, se integraran en sus
filas hasta que por sí solo el Ejercito del Aire pudiera cubrir sus
necesidades. De esta forma muchos especialistas sobre todo de las Armas de
Ingenieros y Artillería cubrieran los huecos que las necesidades de la Aviación
tenia. Los Ingenieros fueron necesarios para las transmisiones, y los
artilleros para la defensa de los aeródromos (baterías antiaéreas). Tras el
final de la segunda guerra mundial y la desaparición de la amenaza de una invasión, no solo de la
península si no también del Protectorado de Marruecos, la mayoría de estos
especialistas de Ingenieros y Artillería volverían a sus respectivas unidades
en su Ejército. A partir de 1946 y aunque el rombo sigue siendo oficial, puesto
que así lo determina el Reglamento de Uniformidad de Ejercito de Aire,
prácticamente no se usaba y la mayoría, por no decir casi todos los componentes
de otros Ejércitos ya no están en Aviación.
Lamina de la Cartilla de Uniformidad
de 1941 donde podemos apreciar los rombos grises que en este caso un artillero
porta en las hombreras de su uniforme.
Esta combinación de emblemas del Ejército de Tierra y del Ejército del Aire
desapareció prácticamente con la aparición del RUEA de 1946 y cuando la mayoría
del personal que no era del Ejercito del Aire volvió a su Ejército de
procedencia. A finales de los años cuarenta ya no había personal de otros ejércitos
agregado al del aire, o bien habían sido incorporados al aire o habían regresado
a sus antiguas unidades.
Fuente: http://splashurl.com/ka7jtfu blog del
Grupo de Transmisiones del Ejercito del Aire. “Historia Militar de las
Transmisiones el Regimiento de El Pardo”, de don Carlos Laorden Ramos. Documento y
emblemas colección Carlos Bourdon