Por Blas Vicente Marco
Como
todos saben, el vuelo del “Plus Ultra” fue una de aquellas grandes proezas de
nuestra aviación en los años 20 del pasado siglo. Ramón Franco en
compañía del capitán Julio Ruiz de Alda, el teniente de navío Juan
Manuel Durán y el mecánico Pablo Rada, unió el puerto de Palos de la
Frontera (Huelva) desde el que partió Cristóbal Colón en 1492, con Buenos
Aires. La distancia recorrida fue tremenda para la época (10.270 km), dando
comienzo el viaje el 22 de enero de 1926 y tras hacer escala en Las
Palmas, la isla portuguesa de Porto Praia, la isla brasileña de Noronha,
Pernambuco, Río de Janeiro y Montevideo, el hidroavión modelo Dornier Do Wal
aterrizó en Buenos Aires el 10 de febrero tras 59 horas y 39 minutos de
travesía aérea.
Portada del diario ABC del 11 de febrero de 1926
conmemorando la travesía del “Plus Ultra”.
Con motivo de mi anterior artículo dedicado al
“Lanzabombas Marte” que diseñó Cipriano Rodríguez Díaz, alias Cucufate,
solicité algunas fotos y la correspondiente ayuda a dos de mis amigos Antonio
Alonso y Javier Bermúdez de Castro.
En
concreto, lo que les pedí era que me mandasen buenas fotos y me explicasen un
poco qué era una Bomba Hispania A-5 (usada en el mencionado lanzabombas), que,
aunque tenía idea de ellas (también por fotos), desconocía cualquier otro dato.
Como
comenta Antonio en su página (y transcribo de forma literal), “la bomba Hispania A-5, fue patentada y
fabricada por la empresa Talleres de Guernica S.A. en 1925 como "Bomba de
Troceo para Aviación”. Su forma es fusiforme con cuatro aletas estabilizadoras
que van encajadas en una pieza de madera y fijadas mediante una arandela. Sus
características son: Longitud: 67 cm. Diámetro: 10 cm. Peso: 12,5 Kg.
Explosivo: Trilita.”[1]
Antonio, me dijo que, aunque no tenía ninguna foto buena
a mano, tenía unas tomadas en el Museo Naval de Madrid, a una de estas Bombas
Hispania A-5 que, sin duda, era de lo más curioso.
Qué sorpresa la mía cuando vi las fotos, pues ciertamente
era curiosa. Y la peculiaridad de la bomba conservada en este museo, que sin
duda pasará desapercibida para muchos, es que fue fabricada para conmemorar el
vuelo del “Plus Ultra” antes reseñado.
El cartel que la acompaña nos lo explica: “Está
decorada especialmente para conmemorar el vuelo del Plus Ultra (1926), con el
escudo de la Aeronáutica Naval, los nombres de Franco, Ruiz de Alda y Rada y el
año del vuelo, grabados en oro. Donación de los “Talleres de Guernica” al
Ministerio de la Marina en 1926”.
Y efectivamente, en las fotos
obtenidas por Antonio y Javier, se observa parte de la decoración de esta
bomba, con el nombre de Franco, el año 1926, una representación del Globo
Terráqueo sobre el que hay una línea de puntos que indicaría el trayecto de la
aeronave, el emblema de la Aeronáutica Naval, y la cola en madera con sus
aletas estabilizadoras y la anilla de sujeción. Como puede verse, la espoleta
está incompleta (carece de la hélice y las masas, como me comentan los
expertos).
Y curiosamente, esta donación quedó reflejada en el
Diario Oficial del Ministerio de Marina[2],
número 179, de fecha 13 de Agosto de 1926, dónde se dice, en la Sección de
Material.-Aeronáutica, lo siguiente:
Acepta
de la S. A. «Talleres de Guernica» el valioso modelo de la bomba «Hispana» que,
con destino al Museo que se ha de organizar en la Escuela de Aeronáutica Naval,
ha donado a este Ministerio, alusivo al vuelo Palos-Buenos Aires, con los
nombres de los tripulantes del «Plus Ultra» y el emblema de la Aeronáutica,
entre otros grabados en oro, inventada y construida por aquella Sociedad, y que
usa nuestra Aeronáutica, siendo asimismo la Soberana voluntad de Su Majestad se
den las gracias en su Real nombre a la mencionada Sociedad.
10
de agosto de 1926.
Sr.
General jefe de la Sección del Material y Director de la Aeronáutica Naval
Sin duda, la pieza es una verdadera
joya, y no sólo por los materiales preciosos usados, sino por su valor
histórico con la referencia a la conmemoración de uno de los mayores logros de
la historia de nuestra aviación.
Diversos
detalles de la A-5 existente en el Museo Naval de Madrid.
Para concluir recomiendo
la visita al museo naval de Madrid, por lo que dejo un enlace por si es de
interés.
Mi agradecimiento a
Antonio Alonso y a Javier Bermúdez de Castro por su inestimable ayuda en este y
en muchos otros temas.
[1] Datos
obtenidos de la página web: http://www.amonio.es/index2.htm
No cabe duda, este blog tuyo sorprende a menudo y hace aprender siempre.
ResponderEliminarDe eso se trata, de aprender y de enseñar...
EliminarGracias Ángel